DOS ALAS DEL MISMO ESPÍRITU
“Mi amada:
Todos mis centros,
todos mis cuerpos
se abren y unifican a ti.
Mi fuego es tu fuego.
Somos el núcleo esencial
que Nuestro Dios Madre-Padre
Amó y Creó en aquel instante primero.
Nos hemos encontrado aquí,
al igual que lo hacemos e hicimos,
en otros mundos y tiempos.
En otros universos y en otras dimensiones.
La Presencia de Dios,
en la que somos y amamos:
nos conduce y nos guía
a la Comunión
inicial y última”.
Nieves B
Tu y yo, somos ya un mundo nuevo.
Cuando nos miramos,
cuando nos pensamos,
cuando nos sentimos:
Creamos mundos dorados.
No hacen falta muchas palabras,
para proclamar que contigo
me vivo plena.
Que ríos de Luz nacen de mi
con sólo mirarte,
pensarte o sentirte.
Que la Unidad que somos
me ha elevado
a la preciosa Cima
de mi íntegro Ser.
Somos una misma célula
y cada instante:
en mi, tu corazón
de ti, mi corazón
la Felicidad brota
con inmensas alas
de Amor, de Luz
de Comunión.
Nieves. Hoy y Siempre
Desde el eterno instante
en el que contemplamos,
la Resplandeciente Belleza
de nuestro Ser Real:
No ha habido un momento
en que no te amara.
Tu esencia y sustancia,
habita latiente, en mi alma
y en mi corazón.
Tu Radiante Pureza
siembra por mis cuerpos,
luminosas hebras de cálida ternura.
Vives en mi espíritu y en mi alma,
brillas en mis células y en mi corazón.
Nieves B.
Rítmica y suavemente
llenando estás mi alma y mis días:
De chispas de Vida y
Sol,
de Luz-azul de mediodía.
Estás hasta en el último núcleo
de cada átomo de todos mis cuerpos,
y en las atmósferas todas que respiro:
llenando de sonrisas y luceros
mi corazón y mi frente.
Mariposas blancas, de ángel aleteo,
que mi espíritu elevan en sus ondas
sembrando de Amor y Gratitud los Cielos.
En tus ojos, en tu rostro,
la Gloria vive y brilla.
llenando de Soles y Cielos
mi corazón y mis días.
Nieves B.
