Todo allí es color dorado fuego
Maria A. 2000
El color del mar, de las rocas,
del cielo y de la espuma.
Pero cada elemento con un matiz distinto:
dorado anaranjado, o más suave y más denso.
Todo es una atmósfera
dorada fuego.
Es un Silencio dorado.
Es una dulce Palabra en las ondas,
en el color:
es Vida, suavidad y quietud.
Ve a ser en él, a conocerlo:
es paralelo y está dentro de ti,
es otro hogar donde puedes vivir.
Nieves B. Abril 1991
llenan la alcoba.
Fuera, lucientes estrellas se extienden
por el índigo cielo.
La noche, viva:
repleta de alegrías chispeantes
y unidades reales de pensamiento.
De mi cuerpo brota
un éter, luminoso y suave.
Y los rayos de mi corazón
se intensifican y extienden:
azules, dorados
y violeta.
Crea mi mente un Sol de Paz
y expansiva alegría,
cuyos Rayos abarcan el total Universo.
No hay noche ni horas:
hay llamas y Color y Energía.
Todo es Potencia, Creación y Vida.
Todo es Conciencia.
Mi atención se hace un punto:
el mundo interno y el mundo externo.
Y en ese instante en que la Mente
tira de mí,
la realidad física, como tal, desaparece
y estoy en el cielo de mi mente,
en un Cielo de Dios.
Hay momentos en que deseo ser
sólo Allí:
sin pasar por el estar aquí,
por el escribir, por el respirar.
Sentirlo no me entristece,
me colma de fuerza y de Paz;
por la absoluta certeza,
de la Realidad del Espíritu.
...Todo sería nada,
si el Todo no es.
Sería un sueño el Universo,
la belleza, la Vida.
¿No estamos a la vez en el silencio,
en el aire o en otro corazón?.
En el mismo instante somos,
somos siete por infinito realidades.
Pero ninguno es,
sin el Ser del Espíritu.
Es cierto, nuestra mente crea mundos,
y cielos reales. Pero el Cielo
que comparte e ilumina nuestra mente
no lo hemos creado nosotros.
Es el Ser, es la única Mente,
el único que Es.
Nieves B. 13
Mayo 1991
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